La clave para conseguir un sello impermeable en una bolsa seca es asegurarse de que el primer pliegue sea lo más apretado y nítido posible.
Es este pliegue el que crea una barrera impermeable para detener cualquier ingreso.
Una vez que se haya asegurado de que el pliegue esté lo más ordenado posible, también es importante seguir doblando una y otra vez para tener una serie de dobleces muy apretados en el material que agregan compresión a todos los demás pliegues dentro de ellos.
Con un material de bolsa seca liviano a veces es necesario tener una barra de refuerzo o una sección de cincha en la apertura de la bolsa para ayudar a que el primer pliegue sea lo más nítido posible.
Y a la inversa, con las bolsas pesadas donde el material es mucho más difícil de doblar, es más importante asegurarse de que el primer pliegue sea lo más ajustado posible.
Vemos muchas fotografías de personas que han enrollado sin apretar una bolsa seca para cerrarla. Eso provocará fugas si la bolsa se sumerge durante demasiado tiempo.